EL QUESHQUE CONSIGUIÓ SUS ESPINAS
En un lejano desierto había un queshque el cual no tenía espinas por que siempre las llamas y vicuñas le mordían para refrescarse de la gran sed que tenían porque en este lugar no había agua. En la falda de un cerro de arena, había una roca que estaba compitiendo con una zorra para ver quien era la más veloz.
La zorra cuando estaba siendo derrotada de lejos llamó al queshque para que detuviera a la roca y así la zorra pudiese ganar. El queshque a cambio de su ayuda recibiría las uñas de la zorra. Cuando la zorra ganó tuvo que darle las uñas al queshque y en ese momento le crecieron espinas similares a las uñas de una zorra así se pudo defender de las llamas y vicuñas que nunca más le mordieron.
AUTORA: LESLIE.
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